El trabajo de los estudiantes de Cine y Audiovisual de la UNILA ha ganado un premio internacional.

El podcast “Los relatos de las grandes aguas” ha sido el ganador del 3er Concurso Audiovisual Iberoamericano de Divulgación Cultural y Científica

El proyecto “Los relatos de las grandes aguas”, trabajo de fin de curso de un grupo formado por cuatro estudiantes de Cine y Audiovisual de la UNILA, ha ganado el premio al mejor podcast en el 3er Concurso Audiovisual Iberoamericano de Divulgación Cultural y Científica, celebrado en México a principios de agosto.

El concurso forma parte de la programación de la Cumbre Iberoamericana de Medios Públicos y es promovido por la Asociación de las Televisiones Educativas y Culturales Iberoamericanas (Atei). En total, participaron 234 trabajos, distribuidos en 9 categorías. “Los relatos de las grandes aguas” fue el ganador en la categoría Programa de Radio o Podcast Científico Cultural.

El podcast -o cineaudio, como lo define el grupo- acompaña la historia de tres amigos en un viaje por las leyendas de las Cataratas del Iguazú y está dividido en tres episodios, de aproximadamente 15 minutos cada uno. El primero y el segundo cuentan dos leyendas guaraníes para la formación de las cataratas y el tercero está reservado para un “debate” sobre la cultura guaraní. Para el concurso, se envió una versión más corta del primer episodio. Los demás están siendo finalizados.

Yendo en contra de la corriente, el grupo optó por apostar por el sonido en detrimento de la imagen para contar las historias guaraníes que narran la formación de las Cataratas del Iguazú. “Este es el primer trabajo en este formato [en el curso de Cine y Audiovisual] y trajo un poco de la voluntad de mostrar que no es necesario utilizar solo un sentido. De mostrar a las personas que el cine no es solo la pantalla grande”, cuenta Vinícius Boita, que dirigió a los actores y es el responsable del sonido directo. Él dice que siempre ha sido atraído por lo sonoro durante el curso. La misma preferencia de Francisco Javier Criollo Leon, responsable del montaje y edición. “El sonido puede ser totalmente inmersivo. Permite mucha exploración estética. Puede llevarte a lugares que no necesitan del recurso visual. El sonido es muy dejado de lado”, comenta Francisco.

Apostando por el audio, el grupo entendió que podía entregar un producto con la capacidad de ser percibido de diferentes maneras. “El sonido permite esa libertad en muchas cuestiones. En este formato pudimos tener la libertad de la fantasía, de traer otras imágenes”, completa Oriana Stiuv, responsable de la producción.

Giovana Ribeiro, que se encargó de producir el guion y la dirección de arte, relata que optar por el audio impuso desafíos, pero trajo nuevas posibilidades. “Tuve una libertad creativa mucho mayor, sin embargo, creo que fue un desafío conseguir mezclar esa libertad con lo que era posible. El gran desafío fue hacer un guion que creara ese imaginario en el oyente”, dice.

El objetivo de los estudiantes al elegir contar las leyendas de las cataratas fue “dejar algo para Foz”. “Vinimos, estudiamos aquí. Ganamos conocimiento, ganamos experiencia, ganamos un título. Y pensamos en cómo devolver esto a la ciudad, a la región”, dice Oriana, que es venezolana, al igual que Francisco. Vinícius vino de Rio Grande do Sul y Giovana es de Foz do Iguaçu. “Queríamos de forma divertida, lúdica y artística crear una aproximación entre estos dos mundos, que es el mundo del iguazuense, del día a día, con las narrativas originarias, la cosmovisión guaraní”, resume Francisco.

El primer guion escrito por Giovana era para un cortometraje. “Vimos que, en la práctica, no iba a funcionar”, cuenta ella. El guion fue adaptado y el grupo se dio cuenta de que tendría que centrarse en otras soluciones: interpretación, voces, sonido ambiente. “Teníamos que insertar algunas informaciones para ayudar al oyente a identificar, entender mejor y poder seguir la historia”, explica Oriana. “Fue una preocupación muy intensa con la cuestión de la voz”, completa.

La decisión de optar por el cineaudio fue impulsada por la pandemia de Covid-19 que impuso límites para todos. “Estábamos en medio de la pandemia. Hacer un proyecto de TCC [trabajo final de curso] de cortometraje involucraba toda la cuestión de juntar a las personas, salir de casa, correr riesgos y tener que hacer todo un plan de cuidado. Entonces pensamos en algo que pudiera hacerse a distancia”, comenta Oriana.

Para no correr el riesgo de usar términos incorrectos o información que pudiera originar conflictos, el grupo visitó aldeas indígenas de la región para escuchar y aprender cómo dirigir las palabras. “Somos muy conscientes de que somos dos brasileños y dos venezolanos no indígenas, pero queremos contar la historia que consideramos importante”, enfatiza Francisco. “Hicimos una investigación para profundizar algunos conocimientos sobre la cultura guaraní, no solo en libros, sino conversando con ellos, para entender un poco la perspectiva de ellos para lo que estábamos haciendo”, puntualiza Giovana. Para ello, la consultoría del profesor Clóvis Brighenti, de los cursos de grado y posgrado en Historia, fue fundamental. “Él ayudó mucho a entender esta cuestión de la mitología. Entendimos que no existe una única versión para la leyenda y que es más una cuestión de pasar el conocimiento, los valores, de generación en generación”, dice ella.

Sabedores de esto, los estudiantes buscaron otras versiones para la historia que conocieron con los guaraníes de la región fronteriza. “Fue muy difícil, no hay mucha bibliografía, fue uno de los mayores desafíos”, cuenta Oriana. Con la ayuda del orientador del trabajo, Kira Santos Pereira, encontraron un libro sobre mitología guaraní, editado en Argentina, que presentaba una “versión un poco más épica, un poco más del génesis del mundo, aunque más dirigido a las cataratas”, dice ella. Cada una de estas historias ganó un episodio y el tercero “es un rescate de la cultura y la importancia de la tradición oral para la formación del imaginario colectivo en la ciudad”, describe Francisco.

La idea inicial era tener guaraníes interpretando a los personajes que conducen las historias, pero una serie de dificultades imposibilitó esa participación. “Sin embargo, conseguimos a una persona, Antonio, él forma parte de una aldea en Puerto Iguazú. Antonio hace uno de los dioses y su participación trajo mucha riqueza al proyecto”, cuenta Oriana.

Desde la producción hasta la finalización del primer episodio, el trabajo duró tres semestres. El episodio ganador está disponible temporalmente en la página del concurso (https://ateimediatv.uv.es/tvsite/tv/). Tan pronto como se finalice la serie estará disponible en plataformas digitales.

El concurso en el que “Los relatos de las Grandes Aguas” (https://www.instagram.com/relatosdasgrandesaguas/) fue premiado reúne producciones de países iberoamericanos. “No teníamos expectativa de ganar. Ser nominados ya era bastante”, comenta Oriana. Francisco recuerda que había competidores con producciones realizadas en colaboración con medios de comunicación. Con los mil dólares del premio, el grupo pretende concluir los dos episodios restantes, mejorando algunos elementos. El material está en fase de edición.