Netanyahu bajo la mira: protestas en Israel y ataque a las Fuerzas Quds de Irán

El ataque al consulado iraní en Siria atribuido a las fuerzas israelíes provocó múltiples reacciones en Medio Oriente.

La guerra que comenzó a librar Israel en Franja de Gaza hoy se encuentra expandida al Líbano, hogar de Hezbollah, y recientemente alcanzó a Siria, donde el ejército israelí atacó el consulado de Irán en el país. Las consecuencias del ataque todavía no se dejan ver, pero el temor a una respuesta iraní se suma al aumento de las protestas locales.

En DEF te contamos los detalles del ataque de Israel en Siria y cómo repercutió en Tel Aviv y Teherán.

Israel golpea a Irán en Siria

Tras largos meses de tensión luego del ataque terrorista de Hamás, el 7 de octubre y el comienzo de la ofensiva en Franja de Gaza, Israel ataca por primera vez a Irán. El ejército israelí desvió la ola de ataques del Líbano y el 1 de abril atacó el consulado iraní en Siria.

El bombardeo en Damasco dejó un saldo de 16 muertos, entre los que se encuentra Mohamed Reza Zahedi, el General de brigada de la Guardia Revolucionaria para los Territorios Palestinos, Siria y Líbano.

El General de 63 años ostentaba una carrera de 40 años dentro de las Fuerzas Quds y se convirtió en el único miembro no libanés del Consejo de la Shura de Hezbollah. Allí desempeñó el rol de interlocutor en la alianza entre el grupo terrorista y Teherán. Además, lideraba la Unidad 18000 que actúa en Siria junto al ejército local.

La muerte de Zahedi no fue la única baja sensible: otros seis militares de alto rango que respondían a los Quds murieron en el ataque.

Los cuerpos se trasladaron a la capital iraní, donde se realizó un funeral ante miles de personas. La ceremonia coincidió con la celebración anual del Día de Quds, durante el cual se organizaron grandes concentraciones a favor de Palestina y en contra de Israel.

Durante la manifestación, la televisión estatal dejó ver a ciudadanos llevando fotografías de los fallecidos y carteles con lemas como “Muerte a Israel” y “Muerte a Estados Unidos“.

Entre las voces que se pronunciaron, la que tuvo más trascendencia fue la de Hossein Salami, comandante en jefe del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní. “Ningún acto del enemigo contra la sagrada república islámica quedará sin respuesta“, dijo el General de división.

Lejos de que el alto mando de Irán calmara las aguas, Mohammad Bagheri, jefe del Estado mayor de las Fuerzas Armadas de Irán, dijo que “la respuesta se dará en el momento adecuado, con planificación y con un daño máximo al enemigo, de una manera que le haga arrepentirse de su acción”.

Además, sentenció que “el fuego que se ha encendido en Gaza no se apagará y continuará hasta el colapso y destrucción del régimen de Israel”.

Entre la amenaza externa y las protestas locales

Tras el ataque en Siria y las declaraciones de figuras representativas del régimen de Teherán, el vocero de Israel Daniel Hagari confirmó que el país está en estado de alerta.

“Estamos observando las amenazas y frustrándolas todo el tiempo, en varios frentes, y estamos en un alto nivel de preparación para la defensa y el ataque”, comentó el portavoz militar y agregó que están preparados para actuar en “una variedad de escenarios”.

Sin embargo, Irán no es la única preocupación del gobierno. La tensión interna es cada vez mayor y el descontento de los habitantes se tradujo en numerosas protestas contra el presidente Benjamin Netanyahu, debilitado desde que intentó instaurar una reforma judicial y, sobre todo, por el ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre de 2023.

Cerca de 100.000 personas salieron a las calles de Tel Aviv, Cesarea y Haifa para reclamar por los 129 rehenes y se hicieron visibles múltiples consignas, independientemente de la guerra que se libra en Franja de Gaza.

En medio de los reclamos por las consecuencias del conflicto militar, fue notorio el pedido de dimisión a Netanyahu. El intento de realizar una reforma al poder judicial y socavar parte de sus poderes de contrapeso afectó gravemente la imagen positiva del mandatario.

Durante las manifestaciones que sucedieron los ataques en Siria, se pidió por el llamado a elecciones y la separación entre religión y Estado, uno de los factores que históricamente llevaron a Israel a involucrarse militarmente en la región.
Tras seis meses de conflicto, el apoyo interno y de la comunidad internacional a la ofensiva israelí en Gaza es cada vez menor y la credibilidad de una solución efectiva se diluye ante los numerosos frentes que se abren en Medio Oriente.