El extraño desafío de Duplantis y el gran interrogante del atletismo mundial

Al crecer en Luisiana, muchos chicos tenían un aro de baloncesto o un arco de fútbol. Yo tenía una pista para la garrocha. Y eso nos distinguía de todos los demás, en el barrio y en el estado (Born to fly, Olympics).

El público se pone de pie y él invita al aliento. Respira profundo, mira la garrocha y sale despedido. Da 20 pasos hasta que el último, con la pierna izquierda, le permite elevarse y superar la varilla ubicada a 6,26 metros del suelo.

Todo fue natural. Como el registro que le permitió quedarse con el décimo récord del mundo de manera consecutiva, esta vez en Chorzow, Polonia.

Armand Duplantis es una de las estrellas del atletismo contemporáneo y sus logros ya le permiten meterse entre los mejores de la historia por más que apenas tenga 24 años.

Desde que sobrepasó los 6,17, en Torun, Polonia, el 8 de febrero de 2020, Mondo no ha tenido rival y solo se ha dedicado a subir el listón de a un centímetro para llenar de huellas un camino brillante.

La pregunta que surge inmediatamente después de que golpea la colchoneta es hasta cuándo podrá superar su marca o, más bien, hasta dónde es capaz el ser humano de batir récords en las diferentes disciplinas.

De hecho, tras quedarse con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos París 2024, respondió ante los periodistas que estábamos presentes que “lograr 6,30 sería como ampliar aún más los límites de lo que es posible”.

Así como Bolt en los 100 o 200 llanos, el cubano Sotomayor en salto en alto o el sudafricano Van Niekerk en la vuelta a la pista, hay marcas que parecen imposible puedan bajarse y sin embargo, siempre aparece un fuera de serie que se encarga de echar por tierra cualquier pensamiento lógico.

El último fin de semana, Duplantis se lució en la Diamond League apenas 20 días después de quedarse con el oro olímpico, saltando 6,25. Además, protagonizó —y ganó, claro— el primer concurso en la historia en la que tres hombres superan los 6 metros: el norteamericano Kendricks y el griego Karalis también volaron.

Hay que remontarse a los orígenes de la especialidad, en Gran Bretaña, para repasar las primeras grandes marcas. En 1854, Robert Musgrave y Robert Towers lograron superar los tres metros (3,05) ayudados por una caña de bambú.

El norteamericano Marc Wright pasó por primera vez los cuatro metros: 4,02, en 1912. Hacia la década de 1950 aparecieron las cañas de aluminio y un par de lustros después, las de fibra de carbón. Así, el primero en alcanzar los cinco metros fue el saltador norteamericano Brian Sternberg, con 5,00 en 1963.

Hubo que aguardar hasta 1984 para el siguiente paso, los seis metros, la marca dorada de la garrocha. Y fue de la mano de unos de los atletas más famosos de todos los tiempos: Sergei Bubka. El ucraniano tomó la posta con 5,84 y batió 17 veces el récord del mundo hasta alcanzar 6,14, una década después.

El registro permaneció vigente 20 años hasta que en 2014 emergió el único apellido entre Bubka y Duplantis: el francés Renaud Lavillenie saltó 6,16 en febrero de 2014.

“Tengo que mejorar muchas cosas para saltar un centímetro más alto. Parece poco, pero es mucho. Para mí un centímetro simboliza que sigo progresando. Cada vez es más difícil y eso hace parecer que el desafío no ha hecho más que empezar”, dijo Mondo, que nació, se crió y creció en Luisiana, Estados Unidos, pero eligió representar a Suecia, el país de su madre.

“Se trata simplemente de estar en buena forma y creer que puedes hacerlo. Siempre quiero saltar lo más alto que pueda y seguir empujando. Nunca he realizado un salto que me haya parecido absolutamente perfecto, así que siempre siento que puedo hacerlo mejor”, agregó ante la prensa.

¿Hasta dónde llegará?

Algunos récords vigentes:

100 M
Masculino – 9.58: Usain Bolt (Jamaica), el 16 de agosto de 2009 en Berlín
Femenino – 10.49: Florence Griffith-Joyner (Estados Unidos), el 16 de julio de 1988 en Indianápolis

200 M
Masculino – 19.19: Usain Bolt (Jamaica), el 20 de agosto de 2009 en Berlín
Femenino – 21.34: Florence Griffith-Joyner (Estados Unidos), el 29 de septiembre de 1988 en Seúl

400 M
Masculino – 43.03: Wayde Van Niekerk (Sudáfrica), el 14 de agosto de 2016 en Río de Janeiro
Femenino – 47.60: Marita Koch (Alemania), el 6 de octubre de 1985 en Canberra

5000 M
Masculino – 12:35.36: Joshua Cheptegei (Uganda) el 14 de agosto de 2020 en Mónaco
Femenino – 14:00.21: Gudaf Tsegay (Etiopía), el 17 de septiembre de 2023 en Eugene

10 000 M
Masculino – 26:11.00: Joshua Cheptegei (Uganda), el 7 de octubre de 2020 en Valencia
Femenino – 29:01.03: Letesenbet Gidey (Etiopía), el 8 de junio de 2021 en Hengelo

Salto en alto
Masculino – 2.45: Javier Sotomayor (Cuba), el 27 de julio de 1993 en Salamanca
Femenino – 2.10: Yaroslava Mahuchikh (Ucrania), el 7 de julio de 2024 en París

Salto con garrocha
Masculino – 6.26: Armand Duplantis (Suecia), el 25 de agosto de 2024 en Chorzów
Femenino – 5.06: Yelena Isinbayeva (Rusia), el 28 de agosto de 2009 en Zürich

Lanzamiento de jabalina
Masculino – 98.48: Jan Železny (Rep. Checa), el 25 de mayo de 1996 en Jena
Femenino – 72.28: Barbora Špotakova (Rep. Checa), el 13 de septiembre de 2008 en Stuttgart

Media maratón
Masculino – 57:31: Jacob Kiplimo (Uganda), el 21 de noviembre de 2021 en Lisboa
Femenino -1:02:52: Letesenbet Gidey (Etiopía), el 24 de octubre de 2021 en Valencia

Maratón
Masculino – 2:00:35: Kelvin Kiptum (Kenia), el 8 de octubre de 2023 en Chicago
Femenino – 2:11:53: Tigst Assefa (Etiopía), el 24 de septiembre de 2023 en Berlín

El nuevo desafío

Ya instalado como una figura mundial del deporte, el futuro inmediato le planteará a Duplantis un desafío fuera de lo habitual.

Se enfrentará al noruego Karsten Warholm —plusmarquista mundial de 400 metros con vallas, con 45.94 segundos— en Zúrich, el próximo 4 de septiembre, en una prueba de 100 metros llanos.

Este curioso desafío escandinavo se veía planeando desde hace tiempo. El año pasado, Duplantis, que tiene una marca de 10.57, ya había declarado: “Me encantaría competir contra Karsten, sería divertido y hago muchas sesiones de sprint en primavera”.

Warholm, de 28 años, que tiene una mejor marca personal de 10.49, tampoco se opuso a la idea. “Realmente espero que suceda, pero en el momento adecuado. No somos el tipo de personas que rehuyen un desafío como ése. Tengo más que perder que Mondo en esta historia, seamos honestos”.

Luego, sí, la chance de volver a ver a Duplantis en su especialidad será en el cierre de la Liga de Diamante, con su última fecha prevista en el Memorial Van Damme de Bruselas (13 y 14 de septiembre).