Informe del Gobierno muestra que 664 mil personas cumplen condena
Brasil tiene un déficit de 174.436 plazas en el sistema penitenciario. La información fue dada a conocer esta semana en el Informe de Información Penal (Relipen), del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública (MJSP), según el cual la población penitenciaria en el país es de 663.906 presos, mientras que la capacidad de las celdas físicas es de 488.951 espacios.
Los datos, correspondientes al período de enero a junio de 2024, también muestran que casi todos los presos son hombres, con 634.617 encarcelados. La población femenina asciende a 28.770 privadas de libertad, de las cuales 212 están embarazadas y 117 en período de lactancia. El informe también muestra que 119 hijos de presos se encuentran en unidades penitenciarias.
Además, sólo las familias de 19.445 presos reciben beneficios penitenciarios. El beneficio, que actualmente equivale a un salario mínimo (R$ 1.412,00), está dirigido a dependientes de personas de bajos ingresos atrapadas en un régimen cerrado y que han cotizado a la seguridad social.
São Paulo es el estado con mayor número de presos, con 200.178 encarcelados. Le siguen Minas Gerais, con 65.545; Río de Janeiro, con 47.331; Paraná, con 41.612 y Rio Grande do Sul, con 35.721. Los estados con menor número de presos son: Amapá, con 2.867; Roraima, con 3.126; Tocantins, con 3.738; Amazonas, con 5.069; y Alagoas, con 5.194.
São Paulo, Minas Gerais y Río de Janeiro son también los estados con mayor déficit de vacantes, con 45.979; 19.834; y 15.797, respectivamente. Luego viene Pernambuco, cuyo déficit es de 12.646; y Paraná con un déficit de 11.325 plazas.
Mientras tanto, Rio Grande do Norte tiene un excedente de 1.601 vacantes; Maranhão tiene un excedente de 514 vacantes; Mato Grosso en 132; y Tocantins en 19 lugares.
El informe también muestra que Brasil tiene 183.806 detenidos en prisión preventiva. De ellos, 174.521 son hombres y 9.285 mujeres. Hay 360.430 reclusos en régimen cerrado, de los cuales 346.225 son hombres y 14.205 mujeres. Los presos semiabiertos suman 112.980. Las mujeres suman 4.761 reclusos y los hombres 108.219. En el sistema abierto hay 4.774 reclusos, de los cuales 4.372 son hombres y 402 mujeres.
El informe también muestra que 105.104 presos son monitoreados con tobilleras electrónicas y que la población bajo arresto domiciliario, que no utiliza equipos de tobilleras electrónicas, aumentó un 14,40%, de 100.433 en diciembre del año pasado a 115.117 en junio de 2024.
trabajar y estudiar
El informe también muestra que 158.380 reclusos realizan algún tipo de actividad laboral, de los cuales 28.748 trabajan al aire libre y 129.632 trabajan en la unidad penitenciaria. Hay 146.476 hombres y 11.904 mujeres que desempeñan algún tipo de trabajo relacionado con actividades rurales, agrícolas, industriales, artesanales, de servicios y de construcción civil.
En relación al estudio, el documento muestra que 118.886 reclusos se encuentran en educación formal, ya sea en proceso de alfabetización, en educación primaria, secundaria, superior o en un curso técnico con una carga horaria superior a 800 horas. De esta cifra, 108.978 son hombres y 9.908 mujeres.
La mayoría (57.442) asisten a la escuela primaria, ya sea presencial o mediante educación a distancia (EaD). Le siguen los que asisten a la escuela secundaria, con un total de 37.485. Luego vienen los presos en el proceso de alfabetización, con 19.908 personas. Hay 3.467 reclusos estudiando educación superior y 1.563 de los que asisten a cursos técnicos.
El informe también muestra que el sistema penitenciario del país dispone de 1.763.464 libros en unidades penitenciarias y que 30.212 reclusos realizan actividades de trabajo y estudio simultáneamente, 27.874 hombres y 2.338 mujeres.
Invalidez, nacionalidad y documentación
El número total de reclusos con discapacidad, al 30 de junio, era de 9.424, de los cuales 9.058 son hombres y 366 mujeres, de los cuales 461 hombres y seis mujeres son usuarios de sillas de ruedas.
Del total de personas en el sistema penitenciario, 45.628 no cuentan con ningún tipo de documento; 2.610 son extranjeros, de los cuales 1.473 no tienen información sobre su nacionalidad.
El documento también muestra que 30.156 reclusos padecen enfermedades transmisibles, como SIDA/VIH, sífilis, hepatitis, tuberculosis y lepra. En el período de enero a junio de 2024 se registraron 1.064 muertes de presos. La mayoría, 747, fueron por motivos de salud; 100 eran criminales; 32 accidentales, 101 de causa desconocida y 84 suicidios.
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