Borges se defiende de acusaciones dentro de PJ: Hay una ansiedad increíble por pasar la página del 28 de julio

El dirigente de Primero Justicia (PJ) y excoordinador nacional de dicha organización, Julio Borges, se pronunció sobre la crisis en la tolda aurinegra, para aclarar que las diferencias giran en torno a la defensa de los resultados electorales del 28 de julio, a favor de Edmundo González y no sobre temas internos ni personales.

En entrevista con el medio La Patilla, el también exrepresentante del gobierno interino de Juan Guaidó para las Relaciones Internacionales, alertó que el poder político en Miraflores quiere apoderarse del partido a través del manejo de su agenda interna y que hay dirigentes que lo están permitiendo para recuperar la tarjeta. Igualmente advirtió que quienes estén pensando en las elecciones regionales y parlamentarias de 2025 “están divorciados” del pueblo que se expresó en las presidenciales por un cambio.

“La realidad es que desde hace más de un año, ha habido dentro de PJ dos visiones de fondo que contrastan enormemente: mientras unos apoyábamos la necesidad de la realización de  primarias, de buscar una candidatura unitaria, hacer una campaña con total entrega y ahora defender con toda la fuerza el 28J, está esta otra visión de quien hace las acusaciones,  que  hizo lo posible dentro de PJ para que no hubiera primarias,  para que el candidato fuera Manuel Rosales, no acompañaron a María Corina en la campaña y que, después del 28J, están con una ansiedad increíble por tratar de pasar la página de esa gesta heroica” fustigó Borges.

“Copian a la dictadura”

El expresidente de la Asamblea Nacional (AN), negó además los señalamientos en su contra sobre malos manejos financieros dentro de PJ y aseguró que hace dos años, cuando entregó la coordinación del partido, lo dejó sin deudas y con un fondo de ahorro para su mantenimiento.

El pasado 9 de octubre, un reportaje de la periodista Celina Cárquez para Efecto Cocuyo, reveló la crisis interna en la tolda aurinegra protagonizada por líderes fundadores como Borges y Henrique Capriles, quien, según fuentes internas, señaló a Borges de no rendir cuentas al partido sobre los manejos financieros y de no creer en las elecciones. Capriles también acusó al exrepresentante de la MUD ante el Poder Electoral, Juan Carlos Caldera, del ala de Borges, de “filtrar información al Sebin” sobre González Urrutia durante la campaña.

“Sobre estar conspirando me preocupa que utilice las mismas acusaciones que usa la dictadura contra los dirigentes, contra los periodistas, contra los que paran en una alcabala, contra los que le revisan su teléfono, contra 1.800 venezolanos que están, injustamente, encarcelados al día de hoy. Para ellos, todos somos conspiradores”, rechazó Borges.

Aseguró estar impresionando por los señalamientos sin pruebas, que es la manera de proceder del gobierno y advirtió que “Venezuela no se merece que nuestros dirigentes copien los modos de ser de la dictadura”.

Condenó además que tras el fraude electoral del 28 de julio, pese al triunfo holgado de la oposición como lo demuestran las actas electorales y la existencia de miles de detenidos por protestar, haya quienes dentro de PJ tengan la “insensatez” de hacer acusaciones falsas para crear una crisis interna.

“Las únicas razones que nosotros vemos son tres: primero, una rivalidad absurda y un no reconocimiento de María Corina Machado, a la que nunca apoyaron en la campaña, ni promocionaban sus actos y hasta se le cortaba de las fotos en las redes; en segundo lugar, quieren mandar un mensaje a la dictadura de deslinde con la lucha por hacer valer el 28J y empezar a normalizar y caer en el chantaje de siempre. En tercer lugar, la posibilidad de hacer méritos para que la dictadura les regale la tarjeta de Primero Justicia a quien se pliegue a la agenda del régimen”, dijo.

“El régimen quiere dividir a la oposición”

Borges alertó que además de intervenir partidos políticos, inhabilitar a dirigentes opositores y perseguir, el gobierno de Nicolás Maduro quiere “cooptar a PJ” y dividir a la oposición entre quienes lo reconocen como presidente y coexisten con su gestión y los que no y tratan de excluir de la participación política.

“(…) No es la forma y no es el medio. Hemos tenido reuniones muy largas para ratificar el 28J, el liderazgo de María Corina Machado y Edmundo González; y de esas discusiones nacen las preocupaciones que mencioné anteriormente. En el fondo, en Primero Justicia hay una lucha para impedir que Nicolás Maduro secuestre el partido. Como dijo María Corina Machado recientemente, el país no perdonará a quienes no den la pelea desde cada una de sus posiciones”, sostuvo.

Recordó que el segundo alcalde más importante del país, como lo es el de Maracaibo, Rafael Ramírez, está preso injustamente y que el chavismo inició la reforma de leyes electorales al estilo cubano, contra la participación de los partidos políticos en elecciones.

“Bajo estas circunstancias, aquellos que estén pensando en elecciones regionales y parlamentarias, sin lograr materializar el triunfo del 28J, están divorciados del corazón del pueblo venezolano.  Parte del debate en Primero Justicia es entre quienes estamos luchando por defender el sentimiento de rabia de un pueblo que se siente robado y desea materializar el 28 de julio y quienes tienen puesta la mirada en otro lugar, desde una posición totalmente personalista y acomodaticia”, recalcó.

En este sentido, condenó desde ya cualquier intento por retomar conversaciones parciales y unilaterales con el gobierno de Maduro, pensando en los comicios mencionados. Esto, en alusión a contactos como los establecidos por Capriles en 2020, para que la oposición pudiera participar en las parlamentarias de ese año. Borges subrayó que apoya la negociación que impulsan Machado y González Urrutia para que se imponga la verdad del 28 de julio.

“Nosotros creemos que hay que repotenciar un movimiento interno para luchar porque se imponga la verdad de lo ocurrido el 28J. Asimismo, tenemos que seguir construyendo con Edmundo y María Corina una coalición internacional para el reconocimiento de ese triunfo histórico y para poner mayor presión sobre la dictadura con el propósito de que se dé una fractura de aquí a enero y con ello se de inicio a un proceso de transición ordenada”, planteó.