Algunos medios afirmaron que los indígenas llegaron “armados”, en “manada” y de forma “intimidante” a las afueras del Congreso colombiano para apoyar el Plan Nacional de Desarrollo.
Una gran polémica ha causado la cobertura de algunos medios de comunicación en Colombia, al narrar de forma errónea la entrada de un grupo de indígenas a las inmediaciones del Congreso en Bogotá, como parte de una protesta pacífica para apoyar el Plan Nacional de Desarrollo (PND), un proyecto de ley que discuten los parlamentarios y que definirá la hoja de ruta de los próximos cuatro años en ese país suramericano.
La descripción de algunos periodistas y medios locales sobre la entrada de decenas de integrantes de la Guardia Indígena a la plaza de Bolívar, en Bogotá, provocó la indignación del presidente de Colombia, Gustavo Petro, quien advirtió que esos sectores de la prensa dicen “una inmensa mentira”, instigan al odio y pretenden generar “una masacre” contra los indígenas.
“¿Por qué esta prensa quiere una masacre contra los indígenas? Saben que un bastón de mando representa el cuerpo del ser humano y no es una arma de fuego, entonces, ¿cuál la razón de instigar el odio contra una población minoría étnica y vulnerable?”, respondió Petro al diario local El País, que tituló: “Guardia indígena llegó armada con palos a protestar a las afueras del Congreso mientras votan el Plan de Desarrollo”.
El mandatario colombiano también respondió al periodista Luis Carlos Vélez, quien escribió en Twitter que la Guardia Indígena habría ingresado al centro de Bogotá “armada” para protestar frente al Congreso, mientras “las autoridades miran”.
“No puedo decir más que esto es una falsedad, una inmensa mentira que puede llevar al asesinato de la juventud. Por favor, por Colombia, deje de decir mentiras desde Miami”, le dijo Petro al comunicador que trabaja para los medios colombianos La FM, Revista Semana y la cadena estadounidense Univisión Noticias.
A esa misma retórica se sumó la directora de la Revista Semana, Vicky Dávila, quien es además opositora al gobierno de Petro, y dijo en un mensaje que acompañó con un video lo siguiente: “En formación ‘militar’, armados con palos y tomándose las calles, así llegó intimidante la Guardia Indígena Nacional al Congreso, mientras se discutía el Plan de Desarrollo. Esta imagen es impactante”.
Entre tanto, el presidente Petro lamentó que justo cuando surgen estos comentarios discriminatorios, resultó asesinado el miércoles un guardia indígena “por proteger a su comunidad de las disidencias y el ELN”.
“Qué triste frente el que se organiza porque no les gusta que la comunidad de base de la sociedad sea autónoma y libre. No les gusta la democracia y la matan y silencian, unos y otros“, añadió.
¿Por qué la polémica?
Las descripciones de la prensa sobre la presencia de los líderes indígenas en Bogotá generaron polémica por su falta de rigurosidad en referencia a los “palos” que llevaban en sus manos, que fueron calificados por la prensa como “armas”, cuando en realidad son Bastones de Mando, uno de sus símbolos tradicionales.
También generó repudio que describieran, con tono discriminatorio, racista y como si se tratara de animales, la llegada masiva de indígenas al casco histórico de Bogotá. “En manada y con palos en mano”, comentó el periódico local El País la entrada a la plaza de Bolívar de más de 300 indígenas que respaldan el Plan de Desarrollo de Petro.
El comunicador colombiano Ronald Mayorga instó a ese medio a “precisar” la información que difundieron para referirse a esta manifestación. “Amigos de El País, creo que urge precisar: La Guardia Indígena no usa ‘palos’, son los tradicionales Bastones de Mando, símbolo ampliamente conocido. Y creo que también es necesario revisar el uso del término ‘manada’ para referirse a un grupo de seres humanos”, escribió en un trino.
Entre tanto, en respuesta a la periodista Vicky Dávila, un usuario identificado como Carlos Murillo le aclaró que aunque la imagen quizá le pueda causar impacto a ella, “es importante recordar que la Guardia Indígena Nacional tiene el derecho a la libertad de expresión y a manifestarse pacíficamente, según lo estipula la Constitución colombiana”.
“Los pueblos indígenas históricamente han enfrentado discriminación y marginación, y sus demandas y necesidades muchas veces no son tomadas en cuenta en la elaboración de políticas públicas. El Plan de Desarrollo en discusión en el Congreso puede tener un efecto significativo en sus comunidades, por lo que es comprensible que deseen hacer oír su voz”, agregó el usuario.
Murillo le recordó a Dávila que la Guardia Indígena es “una figura clave en la protección y defensa de sus territorios, cultura y autonomía, y su presencia en la manifestación puede ser interpretada como una muestra de unidad y resistencia pacífica”. Por eso, agregó el tuitero que se debe “tener en cuenta que la diversidad cultural en Colombia es un derecho fundamental, y es esencial garantizar que todos los grupos étnicos puedan expresarse libremente y participar activamente en los procesos políticos y sociales”.
“Seguimos en Minga”
En medio de la polémica por los calificativos de la prensa contra los indígenas, la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), que es la autoridad nacional de gobierno indígena que promueve los principios de “unidad, territorio, cultura y autonomía”, expresó en un comunicado que están en Minga.
Los pueblos indígenas colombianos llaman a la Minga, una palabra indígena que significa reunión de diversos actores, saberes y herramientas para lograr un objetivo común, y que incluye mantenerse en resistencia y protesta por la defensa de sus derechos.
“Los pueblos indígenas seguimos en Minga. Hoy continuamos en resistencia en la Plaza de Bolívar, frente al Congreso de la República, exigiendo el cumplimiento íntegro de los acuerdos que fueron concertados en la Mesa Permanente de Concertación (MPC) tras un proceso de consulta previa, libre e informada del Plan Nacional de Desarrollo 2022- 2026″, indicó la ONIC.
La organización detalló que en la Plaza de Bolívar, no solo se encuentra la Guardia Indígena, sino que también instalaron “un pequeño ‘mambeadero’ (espacio ritual) guiado por el Consejero Mayor de la organización ONIC, líderes, mayores sabedores y los consejeros y consejeras, en donde se comparte la palabra dulce, la palabra de la que emerge la vida, la palabra que orienta las voluntades”.
“¡Que los antiguos dioses de nuestros ancestros otorguen la poderosa luz de la sabiduría a los parlamentarios para construir un país más equitativo e incluyente!”, agregó la ONIC, que espera que los congresistas aprueben los 280 artículos del PND que fueron pactados en una consulta previa.
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