Las Fuerzas Armadas de Argentina iniciaron la Operación Grifón XVII en las aguas del Atlántico Sur, para reforzar su lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR), mientras cientos de pesqueros, principalmente de bandera china, depredan los recursos ictícolas de la región, informó el sitio de noticias argentino Infobae.

“Es fundamental que los medios navales militares controlen las jurisdicciones marítimas en defensa de la soberanía, teniendo en cuenta las actividades expansionistas chinas en el mundo”, dijo el 14 de febrero a Diálogo el experto argentino en temas de defensa y relaciones internacionales Luis Somoza.

Grifón XVII está bajo control del Comando Conjunto Marítimo (COCM), quien a través de la Armada Argentina, en colaboración con la Prefectura Naval Argentina (PNA), vigila el tránsito marítimo en la zona del Atlántico austral.

Desde la Base Naval de Mar del Plata, el patrullero oceánico Contraalmirante Cordero dio inicio el 15 de enero a la nueva estrategia del Gobierno argentino, para controlar un grave problema sin solucionar desde hace años, que es la pesca INDNR en la milla 200, el límite de su Zona Económica Exclusiva (ZEE), precisó el diario argentino La Nación. 

El ministro de Defensa Luis Petri dijo a la prensa el día del inicio de Grifón XVII, que son entre 450 y 500 buques, en su gran mayoría chinos, que vienen desde el Pacífico, pasan por el Estrecho de Magallanes y se colocan en la milla 201, justo fuerza de la ZEE.

“Al día de hoy, son 344 los que nosotros tenemos perfectamente individualizados”, indicó el ministro Petri. “Especialmente en Latinoamérica, la pesca INDNR causa las mayores pérdidas a las economías locales, además de un gran daño ambiental a raíz de las depredaciones de los recursos naturales marítimos”.

Las autoridades argentinas decidieron concentrar los esfuerzos durante la temporada en la que hay mayor cantidad de calamares, el principal producto buscado por las empresas chinas, que abarca un periodo corto entre los meses de diciembre y marzo, precisó Infobae.

Los barcos chinos que operan en Latinoamérica son en su mayoría de tipo potero, especializados en la pesca de calamar, y que desactivan intencionadamente sus dispositivos del Sistema de Identificación Automática (AIS), una práctica utilizada con frecuencia para evitar ser detectados en zonas donde se practica la pesca INDNR.

“El Partido Comunista Chino tiene participación accionaria en la mayoría de las empresas pesqueras, subsidiando esa acción”, abundó Somoza. “La actividad de pesca ilegal es uno de los principales problemas en los mares de Sudamérica, especialmente en las aguas de Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, Perú y Uruguay, pues las embarcaciones pescan sin descanso más allá de lo autorizado y sin licencias”.

Argentina cuenta con un litoral marítimo de casi 5000 km y una amplia plataforma continental, por lo cual el COCM, creado el 23 de febrero de 2021 bajo dependencia del Comando Operacional del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, cumple un rol clave en el ejercicio de los derechos soberanos y para garantizar la protección de los recursos naturales en el mar argentino.

Los recursos de la Armada se desplegarán principalmente en el paralelo 44, que se encuentra a la altura de la provincia argentina de Chubut, donde se concentra la mayor cantidad de pesca de calamar.

“Hay que hacer control aéreo, hay que hacer control satelital”, dijo el ministro Petri. “Pero además hay que modificar todo el régimen jurídico, particularmente en sanciones administrativas cuando ocurran incursiones a nuestra zona económica exclusiva”.

“La región debe organizarse para demandar acciones de las autoridades chinas, para frenar la actividad irregular de sus buques en aguas latinoamericanas”, agregó Somoza. “Además, debe incrementar las multas y sanciones contra las empresas que operen de manera ilegal”.

Por su parte, el Gobierno argentino busca la aprobación del Congreso para la visita del buque guardacosta USCG James, de la Guardia Costera de los Estados Unidos. De aprobarse la PNA y el buque guardacosta USCG James realizarán un entrenamiento combinado para la defensa de los recursos pesqueros en el Atlántico Sur, detalló el portal argentino Escenario Mundial.

La Guardia Costera de los EE. UU. ha estado presente en operaciones contra la pesca ilegal china en Perú, Chile y Ecuador, en el marco de la Organización Regional de Gestión Pesquera del Pacífico Sur, entidad intergubernamental con 14 países afiliados, que busca asegurar la pesca sostenible en ese sector oceánico.

“Las armadas deben incrementar las operaciones de vigilancia y control con medidas disuasivas, para contrarrestar el avance chino en los mares”, opinó Somoza.

Con una población de más de 1380 millones de habitantes, China es el mayor consumidor mundial de productos del mar. Sus capturas globales crecieron más del 20 por ciento en los últimos cinco años, describió en el diario argentino El Tribuno Agustín Barletti, autor del libro El Hambre del Dragón. El plan de China para comerse al mundo.

Según el centro de estudios Stimson Center, con sede en Washington D.C., China y sus empresas estatales poseen la mayor flota pesquera de altura del mundo, con casi 3000 buques. Esa flota es tres veces más grande que las flotas de Taiwán, Japón, Corea del Sur y España juntas, publica El Tribuno. Se calcula que los buques pesqueros de China se llevaron aproximadamente el 70 por ciento de los calamares capturados en altamar en los últimos años.

“Debe existir una coordinación entre las distintas naciones sumando esfuerzos y capacidades e intercambiando información contra la pesca ilegal”, concluyó Somoza. “China actúa avasallando la soberanía de Latinoamérica en una clara actitud imperialista, en un mundo donde se considera que el 93 por ciento de las reservas pesqueras están ya explotadas al límite”.