“Ahora que dejan traer hasta un televisor de 60 pulgadas sin pagar impuestos estoy pensando en encargar uno a un familiar que se va a Estados Unidos en noviembre”. Ese es el plan de Marina, quien hace meses quiere cambiar su pantalla de 32 pulgadas por una más grande, pero los precios de la marca y especificaciones que busca no están al alcance de su presupuesto.

Por eso quiere sacar provecho a la última actualización que hizo el Servicio Nacional de Aduanas del Ecuador (Senae) de la lista de efectos personales del viajero en la que se establece una cantidad y tipo de objetos que pueden ingresar vía aérea sin pagar impuestos. Y es que uno de los ítems que se modificó en esa lista es justamente el límite del tamaño de televisores. Antes se permitía traer uno de hasta 32 pulgadas y ahora se permite de hasta 60 pulgadas.

Los pasajeros mayores de 18 años ahora también podrán llevar hasta cinco litros de bebidas alcohólicas, lo permitido antes era tres litros. Además de hasta un máximo de 500 mililitros de perfume por pasajero o 1.000 mililitros de perfume por grupo familiar, contenidos en frascos nuevos. La normativa anterior permitía 300 por pasajero y 600 por grupo familiar, entre otros cambios.

¿Cuál es el beneficio real de la medida?

El analista económico Jorge Calderón resaltó el beneficio económico en base al ahorro que un viajero puede obtener al ingresar los productos que constan en el listado del Senae.

Por ejemplo, en el caso de los televisores el ahorro podría significar pagar la mitad de lo que cuesta una pantalla en Ecuador de las mismas o similares características de las que se puedan traer desde Estados Unidos o Panamá, dos de los principales destinos de compras de los ecuatorianos.

Calderón señaló que en Estados Unidos una pantalla de 60 pulgadas, que es el máximo de tamaño que permite el Senae, puede encontrarse desde $ 299 hasta los $ 500 dependiendo de las marcas; mientras un producto similar en Ecuador está entre $ 850 y $ 1.100 en un almacén comercial, “el doble o hasta el triple dependiendo también de la marca”.

En el caso de los licores, calcula que el ahorro va por el orden de entre el 40 % al 50 %, también tomando en cuenta los tipos de licor y teniendo como referencia el whisky.

En los perfumes la proporción de ahorro es ligeramente mayor, de entre el 50 % y 60 % de ahorro si se lo trae como equipaje de pasajero versus lo que se puede hallar en las tiendas en el país. “Por ejemplo, un frasco de perfume de 1.100 ml que en Panamá costó $ 128, en Ecuador se lo encuentra en $ 220″, aseguró el experto.

Costo para el cliente será mucho menor del que paga el importador formal

Una experta en temas aduaneros comparó los precios de comprar en Estados Unidos y lo que le cuesta a un importador formal traer estos productos al país:

Una pantalla de 55 pulgadas con el valor referencial de Walmart en Estados Unidos cuesta $ 497,99 más el impuesto que es de $ 32,37 el total que paga el consumidor es $ 530,36.

Mientras que para importar el mismo televisor un comerciante ecuatoriano debe pagar un precio FOB (mercancía puesta a bordo del medio de transporte) de $ 461,21, más el seguro y flete de $ 23,06 y eso resulta en un precio CIF (costo, seguro y flete) de $ 484,27. Pero a esto se le debe sumar $ 24,21 de ad valorem, $ 158,14 del arancel específico y $ 79,99 del IVA, lo que finalmente termina en un precio al costo de $ 746,62. Esto es más de $ 200 adicionales a lo que le cuesta a un cliente comprarlo en Estados Unidos.

Compra en Estados Unidos:

Precio en percha: $ 497,99

Impuestos: $ 32,37

Precio final en USA: $ 530.36

Costos para importadores formales:

FOB (televisor de la misma característica y marca): $ 461,21

Seguro y flete: $ 23,06

Precio CIF: $ 484,27

Ad valorem: $ 24,21

Arancel específico: $ 158,14

IVA: $ 79,99

Costo directo: $ 746,62

En el caso de los importadores formales no se está considerando aún todos los costos relacionados a la importación, logística interna y comercialización, como por ejemplo agente de aduana, bodegaje, arriendos, personal de los almacenes, promoción, entre otros.

Por esta razón la experta consultada no está de acuerdo en la actualización aplicada por el Senae. “Para ingresar un televisor al Ecuador hay una serie de tributos que tienen que pagarse… Que hoy haya la posibilidad que una persona lo pueda traer (sin pagar esos impuestos) evidentemente va a ser más barato, pero está en completa contraposición con el comercio formal, lo ideal debería ser que le saquen los impuestos absolutamente a todo”, sugirió.

Comenta que el ciudadano de a pie va a percibir la medida como beneficiosa por comprar más barato, pero insistió que no es correcta la falta de coherencia en política pública. “Por un lado le decimos al que tiene el privilegio de viajar que tiene derecho a tener cosas más baratas; y al que no tiene ese privilegio de viajar entonces lo condenamos a tener cosas más caras”, expuso la experta aduanera. (I)