Tras su regreso de Dinamarca, donde firmó el contrato para la compra de los aviones F-16, el ministro de Defensa dialogó con DEF sobre las prioridades de su gestión. Entre los temas abordados, destacó la alineación de Argentina con EE.UU. y la OTAN, las adquisiciones de equipamiento, el bienestar del personal militar y la participación de las FF. AA. en la lucha contra el terrorismo internacional y el narcoterrorismo.

“Estamos cumpliendo, en muy poco tiempo, con las deudas que se arrastraron durante décadas”, afirmó, con satisfacción, el ministro de Defensa, Luis Petri, quien recibió a DEF en despacho del Edificio Libertador. De regreso de Dinamarca, donde firmó el contrato de adquisición de los 24 aviones F-16, el funcionario se tomó un tiempo para explicar las prioridades de su gestión.

En ese sentido, declaró que la compra de las aeronaves supersónicas fue una decisión política de Javier Milei. “El presidente fue muy claro cuando me dio el mandato de luchar para que las FF. AA. estén adiestradas, alistadas, capacitadas y equipadas”, destacó.

Petri lamentó que en democracia, por un sesgo ideológico de anteriores gobiernos, se haya limitado a las FF. AA. a una “función residual”. “La Ley de Defensa hablaba de una ‘agresión de origen externo’, sin identificar el sujeto responsable de esa agresión”, cuestionó, en referencia a la reglamentación de esa norma hecha por la administración de Néstor Kirchner en 2006. La actual gestión va avanzar en la “modificación integral” del decreto reglamentario para que las FF. AA. puedan intervenir ante ataques del “narcoterrorismo”.

El dirigente mendocino defendió el alineamiento de la actual gestión con “las democracias occidentales y los países que defienden los valores de la libertad”. “Es el lugar en el que la Argentina siempre debió estar”, añadió. Respecto al posicionamiento de la nueva política de Defensa, señaló que el ingreso de la Argentina como “socio global” de la OTAN permitirá a nuestras FF. AA. entrenarse y capacitarse con los más altos estándares internacionales. “Es un beneficio superlativo para la República Argentina”, subrayó.

F-16: las razones que motivaron su compra y una respuesta a los detractores

-¿Cómo define la compra de los F-16?

-Es la compra más importante en equipamiento militar desde la vuelta de la democracia. Pensemos que los Mirage se habían desprogramado hace 10 años y Argentina había perdido la capacidad supersónica y de custodiar su espacio aéreo.

No garantizábamos la soberanía y, por lo tanto, no podíamos defender a los argentinos. Esto es trascendental para la defensa. Es una compra muy esperada por las FF. AA. y particularmente por la Fuerza Aérea, y necesaria para la sociedad.

-¿Qué aportan estos aviones a las Fuerzas Armadas y a los argentinos?

-Poder defender los intereses vitales de la patria, la soberanía, la integridad territorial, la autodeterminación, independencia, libertad y la vida de los argentinos. Se reclama y se requieren FF. AA. equipadas, capacitadas, alistadas y con una legislación que acompañe.

Además, estamos comprando aviones en excelente estado, modernizados con la última tecnología, con una vida útil de 25 años, con posibilidad de financiación y a un precio muy bajo y conveniente para el país.

“Se espera que este año llegue el primer avión”

-Los detractores argumentan que se trata de aeronaves “antiguas”, ¿qué les responde?

-Primero que averigüen con qué se está combatiendo en los conflictos que existen en el mundo: las aeronaves que se están utilizando son los F-16. De hecho, hace pocos días vimos una prueba piloto entre uno tripulado por un humano y otro navegado por inteligencia artificial. Son aviones modernos.

Sino, preguntarle a los especialistas, porque son los aviones que la Fuerza Aérea recomendó. Los pilotos argentinos son de los mejores del mundo y lo han demostrado a lo largo de su historia: ellos recomendaron esta adquisición porque son aviones probados y que se utilizan en 26 países del mundo.

-Con la llegada de los F-16 debería hacerse una inversión muy grande en la VIta Brigada Aérea de Tandil, desde donde operarán, ¿es así?

-Es una inversión que se hará gradualmente, a medida que lleguen los aviones. Se espera que este año arribe el primer avión de entrenamiento y los simuladores.

La compra no solamente supone los 24 aviones que serán entregados en tandas de seis por año, sino que además incluye ocho paquetes de motores, repuestos para las aeronaves por cinco años, el armamento de entrenamiento y la capacitación de pilotos y mecánicos. Esto implica una adecuación paulatina de los hangares y las pistas. Eso se hará de manera progresiva.

Pasado, presente y futuro del FONDEF

-¿Qué pasará con el Fondo Nacional de la Defensa (FONDEF)?

-El destino del FONDEF es el de equipar a las Fuerzas. Pero no fue utilizado correctamente, ya que, en la gestión anterior, un 5% del total fue empleado en gastos corrientes.

Pero, además, nos mentían porque gran parte de los fondos eran del inciso 22. Esto quiere decir que eran destinados a financiamiento internacional y, Argentina, no tenía acceso. Con lo cual, se fondeaba ficticiamente. Esos fondos no se utilizaban para equiparar a las fuerzas, sino que se empleaban para financiar el déficit de las empresas de la Defensa.

-¿Qué pasará con esos organismos?

-Los estamos reestructurando y rediseñando para que sean competitivos, no den perdidas, produzcan y sirvan a los intereses de la defensa y necesidades de las Fuerzas. Porque antes orientaban sus programas de trabajo y su producción a las necesidades de los políticos de turno. Por ejemplo, TANDANOR, en lugar de reparar y construir barcos, terminaba fabricando mobiliario para plazas, estatuas o bicicleteros. 

Y TANDANOR es una empresa estratégica para la Armada en tanto repare y construya barcos.

Polo Logístico en Ushuaia y adquisiciones para el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea

-¿Qué planes de adquisición de equipamiento tienen para las Fuerzas Armadas?

-Estamos trabajando para cuidar cada peso que ingrese al FONDEF, de manera que sea destinado a las prioridades de cada una de las FF. AA. El objetivo es la adquisición de sistemas de armas que permitan un mejor desempeño de las Fuerzas para que puedan cumplir su misión de defender y garantizar la libertad, la vida, la integridad territorial y la autodeterminación, que son justamente los intereses vitales a los cuales está destinada su misión. En tanto y en cuanto lo permitan los recursos y exista el financiamiento, vamos a avanzar en procesos de modernización de nuestras Fuerzas. En la gestión anterior no compraron absolutamente nada.

-El tema de los submarinos es una de las grandes deudas.

-Estamos analizando alternativas. Lógicamente, Argentina tiene que recuperar sus capacidades submarinas.

Ahora bien, los procesos de construcción de estos buques son lentos, demoran entre siete y diez años. Por lo tanto, las decisiones que tomemos hoy no van a tener resultados inmediatos.

-¿Cuál es su visión respecto del Polo Logístico Antártico en Ushuaia?

-Queremos desarrollar el polo integral de la Armada en Ushuaia. Nos parece que es una obra trascendental para Tierra del Fuego, para la Patagonia y para nuestra vida en la Antártida.

En 2025, vamos a inaugurar la base Petrel. Durante la actual Campaña Antártica, se construyeron y se instalaron dos módulos y restan tres módulos más. Además, falta habilitar la pista de aterrizaje y construir el muelle para que pueda llegar hasta allí el rompehielos “Almirante Irízar”. Argentina estaría en condiciones de convertirse en el hub logístico de la Antártida.

Argentina y su lugar en el mundo: la “sociedad global” con OTAN y las democracias occidentales

-En cuanto al posicionamiento internacional de la Argentina, ¿qué implica ser “socio global” de la OTAN?

-Hemos definido, por mandato del Presidente, cuál es nuestra alineación internacional y, en el marco de esa definición, es natural que nos planteemos ser “socios globales” de la OTAN porque nos alinea con las democracias occidentales y con aquellos países que defienden los valores de la libertad.

A su vez, facilita el acceso a financiamiento y equipamiento a bajo costo. Permite la interoperabilidad y la posibilidad de realizar ejercitaciones conjuntas con FF. AA de países miembros o socios globales de la OTAN. Nos da mayor transparencia porque sube los estándares de las futuras compras y las adquisiciones militares.

En definitiva, nos va a permitir ingresar en la discusión de las políticas y las estrategias mundiales en términos de cooperación y de defensa. Argentina ingresa, además, con un programa a medida de sus necesidades, como son, por ejemplo, la seguridad marítima y la ciberdefensa.

Fuerzas Armadas en seguridad: ¿se modifica la ley?

-¿Se va a utilizar a las FF. AA. en seguridad más allá del rol que tienen en este momento en Rosario?

-Producto de una persecución que existió durante el kirchnerismo, se acotaron y limitaron al máximo las capacidades de nuestras FF. AA. Es una de las cuestiones que vamos a reformar en las próximas semanas. Porque fue el decreto reglamentario 727 del 2006 el que violó el espíritu de la Ley de Defensa, acotando el margen de acción de las Fuerzas. Los nuevos desafíos pasan, por ejemplo, por actuar ante actos de terrorismo.

-En ese contexto, ¿qué papel deberían jugar las FF. AA?

-Todos los países occidentales, con principios democráticos y que abrazan los valores de la libertad, utilizan a sus Fuerzas Armadas para prevenir o repeler actos terroristas en el mundo. Argentina no. Y así desaprovecha el enorme talento y profesionalismo que tienen nuestras Fuerzas.

-Usted forma parte del radicalismo, ¿piensa que su partido lo va a acompañar estas reformas?

–Creo que si. De hecho, nosotros primero vamos a impulsar la modificación integral del decreto 727 y, en segundo término, presentaremos en el Congreso una modificación a la Ley de Seguridad Interior para posibilitar que las FF. AA. puedan intervenir ante actos de terrorismo o narcoterrorismo, como los que vive Rosario.

Hay que considerar que la Ley de Seguridad Interior de 1991 habilita a las Fuerzas a intervenir bajo dos hipótesis: una es el apoyo a las Fuerzas de Seguridad en tareas de logística.

-Como lo están haciendo ahora en Rosario…

-Sí. Y la segunda hipótesis es la más extrema: la del artículo 31 de la Ley de Seguridad Interior y del artículo 23 de la Constitución Nacional. Lo que planteamos es una hipótesis intermedia que permita que las Fuerzas, en el marco de un procedimiento establecido por la Ley, con control judicial, convocadas por el comité de crisis, y ante hechos terroristas que hayan sido calificados por la justicia, puedan realizar operaciones de seguridad interior, prestando, por ejemplo, control y vigilancia de vehículos, personas o instalaciones.

“La actuación de las FF. AA. va a ser en el marco de una ley votada en el Congreso”

-Si las FF. AA. se involucran en estos temas, ¿qué respaldo legal tendrán?

-Ese tema se resuelve con respaldo institucional y legal. Por eso el Congreso tiene que dictar una reforma a la Ley de Seguridad Interior, que ya prevé el procedimiento para la actuación de las Fuerzas de Seguridad. La manda de actuación de las FF. AA. va a devenir de una Ley votada por el Congreso, no de una regla de empeñamiento dictada por un ministro de defensa.

-¿Qué harán respecto de los vuelos irregulares que ingresen a nuestro espacio aéreo?

-Estamos rediseñando todo el control del espacio aéreo en nuestro país. Estamos trabajando en las posibilidades ciertas de identificar a quienes ingresan. Además, en un trabajo coordinado con el Ministerio de Seguridad, apuntamos a que las FF. AA. puedan lograr incautaciones efectivas de aquellos que, por ejemplo, ingresan con droga en la República Argentina.

Hay que coordinar esfuerzos para lograr operativos exitosos a partir de la identificación, interceptación, decomiso en tierra y la aprehensión de quienes cometen delitos.

Salarios, derechos humanos y servicio cívico voluntario

-Si comienzan a trabajar con esas misiones, y teniendo en cuenta que los salarios de las FF. SS. son mayores en comparación con los de las Fuerzas Armadas, ¿se hará algo al respecto?

-Estamos trabajando. El gobierno anterior prometió completar una equiparación dándole a la maquinita. Nosotros apuntamos a jerarquizar las FF. AA., para que tengan salarios dignos y puedan equipararse, en tanto y en cuanto la economía se recupere. Todo indica que lo vamos  a hacer antes de lo pensado porque hay una baja en la inflación, equilibrio fiscal, superávit comercial, aumento de reservas, disminución del riesgo país y esto habla de que Argentina está empezando a crecer. Este escenario permitirá que mejoremos los salarios de las FF. AA.

-¿Cuál es la postura en materia de derechos humanos del ministerio de Defensa?

-La primera medida que tomamos fue disolver el grupo de trabajo que se había conformado, al que se le asignaban funciones para-judiciales. Creemos que pueden ser asumidas por la Dirección de Derechos Humanos, área que ya existe en el ministerio.

No queremos que exista una caza de brujas por portación de apellido o un verdadero macartismo, como sí ocurrió en la gestión anterior. El ministerio de Defensa tiene las estructuras para conservar el acervo histórico y para dar respuestas a las requisitorias judiciales, sin perseguir desde el propio Ministerio, a las FF. AA., que son de la democracia y defensoras de la Constitución.

-¿Hay alguna propuesta de volver al servicio militar obligatorio?

–No. Nosotros siempre hemos hablado de la necesidad de reestructurar el servicio militar voluntario y de la posibilidad de incorporar el servicio cívico voluntario para jóvenes que no hayan terminado sus estudios. Para que se les pueda brindar una “terminalidad” educativa y capacitación en oficios. Lo estamos trabajando y, en el segundo semestre del año, va a haber un lanzamiento en conjunto con la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, y con su par de Seguridad, Patricia Bullrich.

 “Vengo a aportar trabajo y vocación para cambiar las cosas”

-¿Cómo vive este momento de su carrera política?

-El Presidente de la Nación me honró con el cargo. Vengo a aportar trabajo y tengo mucha vocación para cambiar las cosas. Y, desde el primer día, queremos devolverle a las FF. AA. las capacidades que perdieron. Se las destrató y demonizó durante mucho tiempo y esto implicó desinversión. Nosotros venimos a reivindicar a las FF. AA. en un momento en el que tienen mucho por hacer, particularmente en la lucha contra el terrorismo y en custodiar y proteger nuestros recursos.

Los militares también cumplen un rol destacado en lo que tiene que ver con la Antártida Argentina, porque proporcionan la logística para que se puedan hacer investigaciones y son quienes protegen nuestro espacio aéreo.

-¿Cómo surgió la idea de que el ministro de Defensa vista los uniformes de las FF. AA.?

-Los ministros Agustín Rossi y Jorge Taiana también vistieron uniformes. Siento honor de portar el uniforme.En el mundo nadie se escandaliza por eso. Mucho menos cuando lo hace un Presidente, que es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Me parece que eso forma parte del prejuicio instalado por el kirchnerismo.

De hecho, los militares ni siquiera portaban el uniforme en la calle por temor a escraches o a burlas. Esa Argentina se terminó porque nos sentimos orgullosos de las FF. AA. Y, cuando me toca vestir el uniforme, lo hago con honor y orgullo porque sé que los miembros de las Fuerzas están dispuestos a dejar la vida por la bandera argentina.

Fotos: Fernando Calzada, Ministerio de Defensa y archivo DEF