El secretario de la Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, reveló sospechas de que el embalse de Mazar se vació presuntamente de manera deliberada para profundizar la crisis energética.
En vísperas de la celebración del referéndum sobre las medidas propuestas por el presidente ecuatoriano Daniel Noboa para tratar de atajar la creciente violencia ligada al narcotráfico, el país enfrenta el jueves cortes de electricidad de hasta 13 horas por la decisión de reducir la generación hidroeléctrica ante la sequía.
Asimismo, el ejecutivo nacional llamó a suspender las jornadas laborales de jueves y viernes tanto en los sectores público como privado, así como las clases, tras anunciar que los embalses Mazar y Paute, ambos en el sur andino, están en “condiciones críticas” al registrar niveles de almacenamiento entre 0 y 4 por ciento, respectivamente.
El secretario de la Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, aseveró que existen sospechas de que el embalse de Mazar, de mayor capacidad del país, se vació presuntamente de manera deliberada para profundizar la crisis energética en los días previos al referéndum convocado por el Gobierno sobre reformas en materia de seguridad, justicia y empleo.
El funcionario comentó que “se abrieron las compuertas” de la presa del embalse de Mazar y “dejaron correr el agua”, hasta dejarlo sin el nivel suficiente para que se pueda operar un complejo de tres centrales hidroeléctricas con una potencia en conjunto de más 1.700 megavatios, casi una cuarta parte de la demanda nacional de electricidad.
Izurieta indicó que estas sospechas alimentan la denuncia presentada el martes por el gobierno contra veintidós personas por presunto sabotaje del sector eléctrico. Entre ellas la exministra de Energía y Minas, Andrea Arrobo, quien aseguró que no habría apagones a corto plazo, lo que sucedió sin previo aviso dos días después en varias zonas del país.
El presidente Noboa pidió la renuncia de la entonces ministra de Energía, Andrea Arrobo, por intempestivos racionamientos que empezaron el domingo pasado, declarando también la emergencia en el sector eléctrico y denunciando además un “sabotaje” en el área eléctrica como una de las causas de los cortes, así como de los efectos del calentamiento global.
El plebiscito prevé poner a criterio de los votantes permitir las extradiciones de ecuatorianos requeridos por la Justicia de otros países, instituir juzgados en materia constitucional, reconocer los arbitrajes internacionales en cualquier jurisdicción y flexibilizar la contratación laboral con contratos por horas.
Por eso, Izurieta aseguró que no están previstos apagones para el domingo, cuando se debe celebrar el referéndum con once preguntas, entre las que destaca el apoyo permanente de las Fuerzas Armadas a la Policía en las operaciones contra el crimen organizado, sin necesidad de declarar estados de excepción.
Al problema hidrogenerador de Ecuador se sumó la decisión de Colombia de no venderle energía como alternativa para lidiar con la grave sequía asociada al fenómeno El Niño, que tiene los embalses colombianos por debajo del 30 por ciento de su capacidad.
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